El Autor, hombre de espíritu inquieto, explora todas las vertientes literarias con descaro y sin miedo. Experimenta constantemente, especialmente con la poesía, buscando la forma pura de expresión del espíritu. En cuanto a narrativa tampoco renuncia a ningún género: novela, cuentos, ensayo... En definitiva, el novelista reconoce que el hecho de escribir no es más que una manera de plasmar las emociones internas que piden a gritos escaparse del alma y comunicar a quien quiera escuchar. Aunque su lengua materna es el catalán, no renuncia a llegar a aquellos que desconozcan el idioma; "La lengua jamás debe ser una barrera, sino más bien un instrumento de comunicación entre los seres humanos."